El pasado mes de junio se distribuyó el borrador ISO/CD1 9001 Sistemas de gestión de la calidad. Requisitos a los miembros del Comité ISO/TC 176, iniciándose así un periodo de tres meses para la aportación de comentarios y la votación sobre el avance al siguiente estado en el proceso de revisión.
Este documento incluye algunas novedades, que aunque aún deben ser maduradas por los expertos del grupo de trabajo, ya marcan algunas líneas de cambio destacables. En primer lugar, se adopta la Estructura de Alto Nivel establecida por ISO en sus directivas para el desarrollo de normas de sistemas de gestión. De esta forma, los requisitos específicos de la ISO 9001 quedarán integrados en un esquema, terminología y requisitos generales que serán compartidos por las distintas normas de sistemas de gestión.
La Estructura de Alto Nivel incorpora determinados conceptos que para la Norma ISO 9001 son novedosos y que se están particularizando a su ámbito de aplicación. En este sentido, por ejemplo, en el apartado correspondiente a conocimiento de la organización y de su contexto, será necesario determinar qué aspectos internos y externos pueden afectar a la planificación del sistema de gestión de la calidad para considerarlos en su desarrollo.
En cuanto al apartado Compresión de las necesidades y expectativas de las partes interesadas, el enfoque propuesto es aplicar estos requisitos, además de al cliente, a aquellas partes interesadas que están directamente relacionadas con el alcance de la norma; esto es, usuarios finales del producto o servicio, proveedores, distribuidores y participantes en la cadena de suministro, reguladores, etc. ofreciendo un enfoque a la Calidad Total.
El borrador establece que la organización determina los riesgos y oportunidades que son necesarios tratar, para asegurar que el sistema de gestión de la calidad pueda alcanzar sus resultados previstos; conseguir de forma consistente la conformidad de los productos y servicios, y la satisfacción del cliente; prevenir o reducir efectos no deseados; y alcanzar la mejora continua. Es importante indicar que, aunque se requiere la identificación de riesgos y el establecimiento de acciones para tratarlos, no se establecen requisitos sobre una metodología formal de gestión de riesgos. Desapareciendo el concepto de Acciones Preventivas, dado que se considera que uno de los propósitos fundamentales de cualquier sistema de gestión consiste en actuar, en sí mismo, como una herramienta preventiva.
Adicionalmente, se pretende reforzar el carácter preventivo de ISO 9001 a través de un enfoque basado en la consideración del riesgo (definido como efecto negativo o positivo de una situación de incertidumbre).
La futura Norma ISO 9001 enfatizará también uno de sus elementos más significativos y que para las organizaciones adquiere mayor importancia: el enfoque a procesos. Para ello se ha incluido en el ISO/CD1 9001 un nuevo apartado con los criterios requeridos para asegurar que se lleva a cabo una gestión eficaz de los procesos del sistema de gestión de la calidad.
Se produce a una mayor orientación a empresas de servicios: el término producto se ha cambiado por el de “bienes y servicios”. Se reduce la naturaleza prescriptiva de algunos requisitos de las cláusulas: 7.1.4 Seguimiento y aparatos de medición y 8.5 Desarrollo de bienes y servicios.
Otro aspecto detallado en la nueva norma es Planificación y control de cambios, algo con poco énfasis en la versión actual de ISO y que en un entorno como el actual cambiante, es imprescindible. La nueva versión contempla dos nuevas cláusulas dedicadas a la identificación y gestión de los cambios necesarios para mejorar el sistema de gestión de la calidad:
La nueva versión da importancia a la gestión del conocimiento como activo intangible La cláusula 7.1.5 requiere identificar, proteger y poner a disposición el conocimiento necesario para la gestión de la calidad, determinado las competencias necesarias basadas en la educación, formación o experiencia y que se adoptan medidas para asegurar que el personal cuenta con dichas competencias.
Más hincapié en la Mejora Continua: La nueva norma va más allá, no solamente requiere que se gestionen las No Conformidades, Acciones Correctoras o se realicen auditorías y encuestas, sino que va a instar que las organizaciones utilicen herramientas para llevar a cabo la mejora continua de la organización.
Por último, hay que mencionar que se establece un apartado específico (Control de la provisión externa de bienes y servicios) para incluir los requisitos relativos, no sólo a las compras a proveedores, sino también a externalización de procesos, servicios y funciones, acuerdos con empresas asociadas, etc. La organización debe aplicar los controles apropiados basándose en los riesgos relacionados con dicha provisión externa.
Fuente: Aenor