Las Brigadas de Investigación de Incendios del Cuerpo de Agentes Medioambientales (BIIF) investigaron la pasada campaña de verano la totalidad de los incendios que se produjeron en Castilla-La Mancha, logrando averiguar la causa que los inició en el 90 por ciento de los casos.Según ha informado la Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha (APAM) en un comunicado, las investigaciones llevadas a cabo han determinado que la mayor parte de los incendios acaecidos en la región se han debido a negligencias o causas accidentales (43 por ciento).
Entre estos incendios se encuentran los producidos por cosechadoras de cereal, uso negligente de maquinaria que genera chispas (radiales), líneas eléctricas, barbacoas, colillas o quemas no autorizadas.
Por otra parte, los incendios producidos de forma intencionada han supuesto el 33 por ciento del total y los causados por la caída de rayos han sido el 8 por ciento, han detallado.
PROCEDIMIENTO
El proceso de investigación que desarrollan los Agentes Medioambientales en su condición de Policía Judicial comienza nada más producirse la primera alarma de un incendio.
En ese momento, simultáneamente con los medios de extinción, se dirige hacia el siniestro una unidad de investigación compuesta por dos Agentes Medioambientales especializados en esta materia que, en primer lugar, acordonan la posible área de inicio del fuego para preservarla de alteraciones, anotan cualquier circunstancia llamativa que pudiera existir, así como la presencia de testigos que pudieran prestar manifestación.
Seguidamente examinan exhaustivamente la zona acordonada, observando los indicios de paso de las llamas hasta dar con el punto exacto donde se inició el incendio, y, si lo hubiera, el medio de ignición que lo produjo.
Posteriormente, según indican, cotejan los datos de la investigación pericial con las manifestaciones de testigos y otros indicios, elaboran un atestado en el que, en su caso, se identifica al presunto responsable del incendio y se da cuenta al Juzgado correspondiente para que se inicien las oportunas diligencias judiciales.
Además de llevar ante la Justicia a los presuntos responsables del inicio de los incendios forestales, los resultados de las investigaciones realizadas suponen una importante fuente de datos que posibilita a la Administración adoptar las medidas legislativas y preventivas necesarias para intentar disminuir el número de siniestros en años sucesivos.
La Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha ha solicitado al Gobierno regional que se sigan potenciando las Brigadas de Investigación de Incendios del Cuerpo de Agentes Medioambientales «con el fin de poner freno al aumento progresivo de los incendios forestales en la región».
Fuente: Ecoticias