El Día Mundial de la Eficiencia Energética (World Energy Efficiency Day) se celebra cada año el 5 de marzo para recordar a ciudadanos, empresas e instituciones la importancia creciente de realizar un consumo responsable de la energía.
Su origen se remonta a la primera conferencia internacional sobre eficiencia energética, que se celebro en 1998 en Austria. En ella, más de 350 expertos y líderes de 50 países debatieron sobre la crisis de la energía y sobre la eficiencia energética como una de las posibles medidas necesarias para combatirla.
Las buenas prácticas en Eficiencia Energética suponen para la empresa unas pautas de actuación sencillas, que en muchos casos llevan asociado un bajo coste en su aplicación, pero que se traducen en una mejora de la eficiencia, con unos resultados rápidos y altamente rentables.
Desde Qalma recomendamos la implantación de un Sistema de Gestión Ambiental, basado en la norma UNE-EN ISO 14001, que permita a la organización alcanzar diversos beneficios ambientales:
- Mejorar la percepción de la organización respecto al cliente y a la sociedad en general, porque se les asegura que se cuida el entorno ambiental de la organización.
- Reducir costes de operación a través de la mayor eficiencia de los procesos.
- Asegurar el cumplimiento de los requisitos legales ambientales aplicables (normativa voluntaria y legal)
- Alta moral y motivación de los empleados ya que trabajan en una organización medioambientalmente responsable.
- Establecer una política y unos objetivos acordes a los aspectos ambientales identificados.
- Controlar los aspectos ambientales y llevar a cabo planes de emergencia ambiental.
Os proponemos implementar el siguiente Decálogo de Buenas Prácticas que conseguir una mayor eficiencia energética:
Apagar las luces de las salas y habitaciones cuando no se utilizan contribuye a reducir el consumo de energía.
Mantener limpios los focos y lámparas, generando un ahorro de hasta un 10% en el consumo eléctrico.
Mantener encendidos los tubos fluorescentes en salas donde sea necesario volver a encenderlos en menos de 30 minutos, evitando el alto consumo de energía que se produce en el encendido.
Trabajar en soporte informático para guardar documentos y revisar errores o mejoras antes de imprimir
Apagar los aparatos de aire acondicionado cuando no sea imprescindible su utilización. Cuando se usen, hacedlo de forma coherente. La temperatura ideal en invierno es de 20 grados. El abuso de aire acondicionado en verano además de consumir mucha energía supone liberar gases que provocan la destrucción de la capa de ozono.
Apagar el ordenador cuando no lo estéis utilizando, sobre todo a la hora de las comidas y al final de día.
Realizar pequeñas mejoras en el aislamiento, puede conllevar ahorros energéticos y económicos de hasta un 30 % en calefacción y en aire acondicionado
Instalar dispositivos ahorradores de agua y limitadores de presión en grifos
Cambiar la iluminación de tu lugar de trabajo por bombillas de bajo consumo o Led
Aprovechar al máximo la luz natural
BBPP_Sensibilización Energia_2014
¡Descárgate nuestras buenas prácticas y ponlo en un lugar visible para aplicarlo en tu empresa!
Fuente: Qalma